Vengo despacio, pero vengo
- “Levanta los pies un momento. Perfecto. ¿Mejor?”
- Sí, mejor. Mucho mejor.
- “Claro, así no sufren las lumbares. Cuando estés tumbada boca arriba es aconsejable que te pongas un cojín de este tipo debajo de las pantorrillas, estarás más cómoda y no sufrirán otras vértebras, al menos mientras tratamos las que están peor ahora …”
- Lo haré. Gracias.
...Cada día me asombro más de este cuerpo imperfecto dentro del que me hallo, de lo frágiles y quejicosos que son mis músculos y mis huesos, y lo cómplices (y también celosos, sí) que son los unos de los otros. Además, cuando les parece, porque tampoco saben estar, ni mostrarse más comedidos frente a desconocidos o cuando están fuera de casa, se alían en mi contra y me cuesta ganarles la partida y volver a tenerlos controlados. Aunque sea en un equilibrio inestable, pero en un equilibrio, controlados. Este verano los he alimentado y sacado a paseo a diario, para no repetir experiencias, pero no les ha bastado, qué vá, necesitan más, quieren más y mejor. Ya podían aprender de las plantas, que para vivir a gusto y crecer necesitan ni mucha ni poca atención, la justa –como dice mi madre-…
Está costando normalizar, está costando; pero vengo, aunque despacio, cargada de reflexiones, de conversaciones con gente amiga, de vivencias que quiero contaros y seguir compartiendo con vosotros: lo estimulante que resulta a veces desempolvar el pasado para encontrar sentido al presente; cómo pese a mis intentos me he quedado sin entrada para ver SyS; lo fácil que es encontrar nuestra identidad, a veces perdida, en este mundo endemoniado de “estereotipos” si prestamos atención a lo cotidiano y bebemos de la savia de determinados momentos (Uma y cía. lo expresan muy bien en su blog “instantes”, que es una maravilla, http://hayacequias.blogspot.com/ ), de lo provechoso que es en ocasiones “gestionar la ocultación” en algunas relaciones personales…y más...Vengo despacio, pero vengo.
- Sí, mejor. Mucho mejor.
- “Claro, así no sufren las lumbares. Cuando estés tumbada boca arriba es aconsejable que te pongas un cojín de este tipo debajo de las pantorrillas, estarás más cómoda y no sufrirán otras vértebras, al menos mientras tratamos las que están peor ahora …”
- Lo haré. Gracias.
...Cada día me asombro más de este cuerpo imperfecto dentro del que me hallo, de lo frágiles y quejicosos que son mis músculos y mis huesos, y lo cómplices (y también celosos, sí) que son los unos de los otros. Además, cuando les parece, porque tampoco saben estar, ni mostrarse más comedidos frente a desconocidos o cuando están fuera de casa, se alían en mi contra y me cuesta ganarles la partida y volver a tenerlos controlados. Aunque sea en un equilibrio inestable, pero en un equilibrio, controlados. Este verano los he alimentado y sacado a paseo a diario, para no repetir experiencias, pero no les ha bastado, qué vá, necesitan más, quieren más y mejor. Ya podían aprender de las plantas, que para vivir a gusto y crecer necesitan ni mucha ni poca atención, la justa –como dice mi madre-…
Está costando normalizar, está costando; pero vengo, aunque despacio, cargada de reflexiones, de conversaciones con gente amiga, de vivencias que quiero contaros y seguir compartiendo con vosotros: lo estimulante que resulta a veces desempolvar el pasado para encontrar sentido al presente; cómo pese a mis intentos me he quedado sin entrada para ver SyS; lo fácil que es encontrar nuestra identidad, a veces perdida, en este mundo endemoniado de “estereotipos” si prestamos atención a lo cotidiano y bebemos de la savia de determinados momentos (Uma y cía. lo expresan muy bien en su blog “instantes”, que es una maravilla, http://hayacequias.blogspot.com/ ), de lo provechoso que es en ocasiones “gestionar la ocultación” en algunas relaciones personales…y más...Vengo despacio, pero vengo.
8 no pudieron callarse:
Gracias una vez más a todos lo que formáis parte del Pandemonium, por seguir dejándome habitar este espacio (y en los últimos tiempos casi monopolizarlo) -aunque ya me gustaría a mí que no fuera así, y que os dejárais ver-, que es más vuestro que mío. Un beso a todos
...bueno, el caso es que vengas...ponte buena pronto.
un besito que ojalá sea curativo
Ese cuerpo tuyo es avaricioso del bienestar...y no quiere "ocultarlo".
Nunca me ha gustado pensar que los post son la realidad de nadie...por no caer en la torpe presunción o en malentendidos.
Supongo que ese ritmo pausado de tu vuelta puede darse a ese inmovilismo de tu cuerpo....no sé..pero si tus palabras son reflejo de una realidad...sólo deseo que "llegues" pronto al destino que deseas.
Cuidate!
Contigo.
Olimpia.
Te echaba de menos.
Vuelve aunque sea despacio.
Y vuelve normalizada.
Besos
Dulci, sabes? los besos siempre tuvieron en mí cierto efecto curativo. Así que lo cojo al vuelo, un besazo!
Jajaja...no sabes tú bien, Olimpia, lo avaricioso que es este cuerpo mío del bienestar...Gracias!. En ello estamos. Un placer volver a verte por aquí. Ya sabes que idem
Yo también a ti, Ybris. Me han reconciliado más de lo habitual tus últimos post, especialmente el de "penumbras"...Besos para ti también.
...la paciencia todo lo alcanza. Tengo muchas ganas de verte!!!. Buen día. Te quiero.
yo te mando un racimo de besos y abrazos...
Vos formas parte de nuestro mundo, entonces agradezco tu presencia y tus palabras siempre llena de cariño.
Instantes, miradas particulares ahora, intenta reflejar una parte de la realidad donde encontrarnos.
Gracias, Libertad.
Un gran beso
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