Murakami y sus influencias...
Cuando cierro los ojos, me veo allí. Al atardecer. Rodeada de mar y luz. Con sabor a sal y la piel bronceada. Con sandalias de esparto y vestido suelto blanco de bambula atado al cuello. Sentada en el suelo de rafia, con las piernas juntas rodeadas por mis brazos y la barbilla apoyada en mis rodillas. Mirando fijamente al horizonte azul, azul intenso, brillante. Con los ojos entreabiertos y la mirada perdida. Con la mente vacía y el cuerpo flotando, pero consciente. Atenta. Con los sentidos despiertos…hasta que el sol se esconde en un mar cada vez más azul intenso y su luz se derrama en el agua…
Luego abro los ojos, y percibo el aire fresco y seco que se cuela por las rendijas de las paredes enjalbegadas de los patios de las casas en las noches de agosto, oigo a los pequeños jugando en la cama, y conversaciones en la calle de la gente que toma el fresco que no distingo…mi mente sigue casi en "estado de pausa", pero mi cuerpo pesa…viene a mi cabeza lo que ocurrió en la colina hace dos años, las personas que me rodeaban entonces… y siento que hoy se cierran unas puertas y que quizás se abren otras, que todo lo que me rodea es cambio, y que las etapas se suceden, como los sueños y la realidad se entremezclan a veces en la vida misma -más allá de Kafka en la orilla-, sin apenas darnos cuenta…
Luego abro los ojos, y percibo el aire fresco y seco que se cuela por las rendijas de las paredes enjalbegadas de los patios de las casas en las noches de agosto, oigo a los pequeños jugando en la cama, y conversaciones en la calle de la gente que toma el fresco que no distingo…mi mente sigue casi en "estado de pausa", pero mi cuerpo pesa…viene a mi cabeza lo que ocurrió en la colina hace dos años, las personas que me rodeaban entonces… y siento que hoy se cierran unas puertas y que quizás se abren otras, que todo lo que me rodea es cambio, y que las etapas se suceden, como los sueños y la realidad se entremezclan a veces en la vida misma -más allá de Kafka en la orilla-, sin apenas darnos cuenta…
14 no pudieron callarse:
Tuve ocasión este verano de leer a Murakami con los ojos perdidos de vez en cuando sobre el Atlántico en Portugal y algo de ese vuelo que cuentas sentía yo también.
Ahora no percibo el aire fresco de ciudades de paredes enjalbegadas sino el de las grises piedras de la Sierra Norte de Madrid mientras el sol da señales de querer asomarse por el horizonte.
Y sí, siente uno que hay puertas que se cierran y puertas que se abren.
Y que el sueño y la realidad juegan a decirnos que vivimos.
Es una delicia leerte a estas horas.
Un beso muy fuerte.
Un gustazo el leerte. Y ese recuerdo de sal lo mejor del verano. Salu2.
Ayys, qué bonito! y quien hubiera podido compartirlo contigo!. Besotes
y estabas guapisima, realmente te elevabas sobre el suelo y realmente te confundias con la luz y el mar. Cierto la vida es cambio, ciclos, volver a renacer constantemente, tener multiples vidas dentro de una vida nos hace tener mas opciones y eso en principio es interesante, además siempre nos quedamos con recuerdos q unen nuestros ciclos y con un puñado de amigos que trascienden y nos acompañan. Mil besitos, fer
Somos muchos en uno, en cada poro y peca =)
Saludos.
Esos eran tus ojos... Eres un cielo. Mil besos para ti.
Leyendo tus últimos post reconozco esa sensación de cambio, de cambio en las relaciones con algunas personas, algunas veces sin saber muy bien porqué, y que cambia nuestra perspectiva y a veces hasta nuestras vidas...
Muchas veces me pregunto qué ha pasado, si habré sido causante de estos cambios o simplemente sujeto pasivo en ellos. Pero en el fondo no importa porque el resultado no cambia.
Pero me gustan los puntos de inflexión en mi vida, es como nacer de nuevo con fuerzas renovadas...es la sal de la vida.
Es verdad, anónimo, creo que importan poco los porqués, y es la realidad de cada momento la que tenemos que asumir y vivir lo más plenamente que podamos...pero a veces se puede actuar sobre estos resultados que no sabe uno por qué son los que son, al menos a veces...
Los puntos de inflexión siempre han sido un acicate para mí, y casi en todas las ocasiones me los he tomado con fuerzas renovadas, con ilusión, y te diría que incluso con algo de excitación, pero me gustan las transiciones con "señuelo", o dicho de otra forma, los cambios, en los que como dice fer, hay nexos de conexión entre unos ciclos y otros, hay amigos que transcienden a los mismos y nos acompañan en ellos. Esos además de un acicate, me deja una sonrisa dulce en los labios...
Gracias por tu visita y tu comentario.
Besos
Una pregunta: ¿es su madre o no?
Leo, leo, leo...y te aseguro que me quedo con ganas de poder ir de tu mano, por eso leo de nuevo, esperando continuar- al menos- a tu lado....y quiero seguirte, ver que sucede después de aquello, y como tus palabras siguen reflexionándo-se....en fin...vengo una vez más y lleno de tu aire de calma mis pulmones.
Contigo.
Olimpia.
...bueno, pues...por esos puntos de inflexión...un beso, wapa.
El mundo está aterido. Necesitamos personas que nos ayuden a expandirlo, a quitarle ese frío. Gracias por ser como eres. La sensibilidad es mal interpretada e incluso tiene mala prensa. Para mí, eres lo más maravillo que me he encontrado en mi vida.
D.
Recuerdos
Y yo veo que con ese cùmulo de sensaciones, no hay forma de huir de la fortaleza que conservas.
Siempre es un placer leerte.
Me transportas-
Besos, Libertad
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