Amor
“En Yucatán, el agua nunca se ve. Corre subterráneamente, bajo una frágil capa de tierra y piedra caliza. A veces, esa delicada piel yucateca aflora en ojos de agua, en líquidos estanques –los cenotes- que dan fe de la existencia del misterioso flujo subterráneo. Creo que el amor es como los ríos ocultos y los surtidores sorpresivos del Yucatán…”
Cuando hace un tiempo leí estas palabras de Carlos Fuentes, pensé que era una de las maneras más lindas de hablar del amor que había encontrado. Hoy, no sé muy bien por qué, me he acordado de esas palabras, y me he quedado algo taciturna y dubitativa…“En Yucatán, el agua nunca se ve…creo que el amor es como los ríos ocultos y los surtidores sorpresivos…”
Cuando hace un tiempo leí estas palabras de Carlos Fuentes, pensé que era una de las maneras más lindas de hablar del amor que había encontrado. Hoy, no sé muy bien por qué, me he acordado de esas palabras, y me he quedado algo taciturna y dubitativa…“En Yucatán, el agua nunca se ve…creo que el amor es como los ríos ocultos y los surtidores sorpresivos…”
6 no pudieron callarse:
Vaya que sí...hay que ver con esa emoción que fluye sin ser vista casi siempre de manera grata y positiva aunque también caótica a veces.
La verdad que volvería al YUCATÄN ya mismo, a pesar de los huracanes.
Un Dulce saludito.
Efectivamente. Es una hermosa manera de hablar del amor de verdad.Del que a veces no se ve ni se siente, pero nos empapa como agua subterránea siempre a nuestro alcance.
Besos.
Y es imposible agua mas cristalina que la de los cenotes.
Habrá que ver qué te hace dudar, muchacha. Seguiremos investigando. Un beso
...Sí, supongo que es esa quinta esencia que está y permanece aunque la queramos obviar.
ay amor que derribas fronteras!!!
Publicar un comentario
<< Home