Hoy 29 de junio...

Mi abuela Annbjorg solía traerme a esta "kota" cuando llegaba la época de conducir los renos hacia los bosques.

En realidad ella tendría que haberse quedado en la aldea. Ésta era una tarea de hombres. Pero todos los años repetía el mismo ritual: se levantaba de madrugada, a la hora en que el sol todavía sueña con deshacer la nieve de Laponia, cogía sus antiguos esquíes de madera y se dirigía hacia el campamento sapmi con un zurrón lleno de carne de reno, mermelada de arándanos y aguardiente. Llegaba al campamento con la capitulación del sol, se sentaba en la parte mas sombría de la cota y, sin pronunciar palabra, escuchaba las historias de los pastores mientras compartían las tiras de carne seca y el alcohol. Después se retiraba con mi abuelo a la "kota" mas alejada. Ella siempre decía que era la mejor para ver el brillo del norte.

Le gustaba recordar aquel diciembre del treinta y ocho, cuando se dirigían hacia su tienda al terminar la velada. Los huskies habían comenzado a aullar y el cielo helado temblaba y se ondulaba con destellos de luz verdes y blancos. Contaba la tradición que en estas noches mágicas en que una aurora rompe la negrura del cielo si se engendra un hijo este nacerá con dotes de artista. Y allí estaban ellos, mirándose en silencio. Entraron en la cota y se abrazaron.

Después, nació mi madre, sin grandes cualidades plásticas. Solo su gran intuición. Fue ella quien reinventó la tradición. Cuentan que si ves una aurora boreal y puedes hacer sonreír a un amigo la amistad durará para siempre… Hoy, 29 de junio, en Sälka se ha cubierto el cielo de una cortina de luz verde y roja. ¿Te apetece ver una ?

(si lo abres no hay marcha atrás. El "conjuro" de mi abuela se ejecutará sin remedio)

http://es.youtube.com/watch?v=eZXzYy1a_7A